Esta semana oramos por el

El valle de Acor

Acán sirvió en el ejército de Israel durante la época de Josué. Después de que el pueblo de Dios ganara una guerra contra sus enemigos, robó parte del botín que debería haber sido dedicado al Señor. Su acción trajo problemas, calamidades y destrucción sobre él y su pueblo. Como castigo, fue apedreado hasta la muerte en una zona llamada valle de Acor, que significa valle del desastre o de la calamidad (Josué 7:24-26).

De hecho, Satanás ha robado una vasta nación, un grupo entero de personas que deberían haber sido dedicadas a Cristo. Dios puede revertir esa tragedia y llevar a los musulmanes al reino de su amado Hijo.

Oración

Dios de la historia, arquitecto maestro de los acontecimientos, te pedimos que manifiestes tu poder y tu gloria. Con santa valentía nos acercamos a ti a través de la cruz. Con alegre gratitud nos inclinamos ante ti. Nos reconocemos indignos de tu favor y de tu gracia.

Oramos contra un enemigo poderoso. Pero Tú eres el Señor y el Rey todopoderoso. Satanás ha usurpado lo que no le pertenece. Ha esclavizado a los musulmanes. Como están alejados de Jesús, están bajo el dominio y la autoridad del enemigo.

Mira desde el cielo y ve la situación de los hijos del islam. Ten piedad de ellos y envía tu Espíritu para que los convenza y los conduzca con seguridad a Cristo, el único Salvador y Señor.

Que sean devueltos al Dios que los hizo, el verdadero Dios, su Redentor. Libéralos, Salvador todopoderoso. Cumple la promesa que nos has dado en tu Palabra de que la llanura de Sarón será un pasto y que el valle de Acor (del desastre) se convertirá en un lugar de descanso para el rebaño, para tu pueblo que te busca (Isaías 65:10).

Por el nombre de Jesús. Amén.

Promesa

El ladrón no viene más que a robar, matar y destruir; yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia. (Juan 10:10, NVI). Y desde allí le daré sus viñas y el valle de Acor será como puerta de esperanza… (Oseas 2:15, RVA).